LIBERTAD DE EXPRESIÓN

La libertad de expresión es un derecho humano, cada uno de nosotros, como personas, tenemos derecho a expresar nuestras opiniones, redactarlas, publicarlas o comunicarlas y tales expresiones deben ser, si no compartidas, respetadas.

El problema de la libertad de expresión radica en que ha sobrepasado los limites que “moralmente” son permitidos (entendiendo a la moral como las normas básicas de comportamiento en publico), confundiendo esta libertad con la oportunidad de insultar y amenazar, alegando tener derecho a hacerlo.
“Podría dedicar párrafos enteros a encontrar una explicación sociológica al fenómeno, a decir que estas manifestaciones son propias de los habitantes de un país que lleva sufriendo los estragos de la violencia ya varias décadas, que la situación interna nos ha llevado a reducir o prácticamente eliminar nuestros límites de tolerancia… En fin… Las explicaciones abundan, aunque las soluciones son pocas, pues nadie puede forzar a alguien a dejar de ser lo que es, sea un caballero o un patán”.

Para entender los fines de la libertad de expresión, debemos entender antes a que nos referimos cuando demandamos nuestro derecho a expresarnos. Puesto que de la libertad de expresión u opinión se trata ¿cabría analizar primero acerca de la libertad, después de la opinión y, por último, afirmar una síntesis dialéctica -de complementación y no de contrariedad- entre esos conceptos y sostener que ella es la libertad de opinión?

Lamentablemente la “libre expresión” es uno de los derechos humanos mas cohibidos en nuestro país, el abuso de autoridad y la delincuencia han acallado las voces de muchos compatriotas, quienes tienen mucho que decir, ejemplo de ello nuestro querido y recordado Lucho Garzón, quien hizo uso a su derecho y murió por la misma causa o Luís Carlos Galán o jorge Eliécer Gaitan o cientos de colombianos asesinados o que en ultimas han tenido que huir o esconderse solo, por hacer un buen uso a su libertad.

El concepto básico de libertad de expresion que surge de aquella tradición se refiere a la total libertad de acción y palabra, salvo cuando ella implica el uso de la fuerza y el engaño en contra de otros individuos. Esta noción de libertad alude directamente a relación entre particulares y no contiene elemento explícito alguno de gobierno. Da a entender que la función del gobierno es la de contener el uso de la fuerza y del engaño, no sólo en los particulares sino también en aquellos a quienes se ha confiado el poder de gobernar y que están armados con el monopolio de la fuerza que ese poder trae consigo.